Tal vez uno de los municipios con mayores posibilidades de bienestar y crecimiento económico en el Estado de Morelos debiera de ser el de Emiliano Zapata. Su situación geográfica lo hace ser uno de los lugares cercanos a Cuernavaca con una diversidad cultural y demográfica inigualable. Con fuerte vocación agrícola desde los siglos XIX y XX, los pobladores de éste hermoso rincón de nuestro terruño han venido sufriendo en carne propia los embates de la “modernidad” al ser su municipalidad objeto de un crecimiento poblacional artificial, monstruoso y desordenado.
Éste crecimiento auspiciado y ofertado convenientemente desde las oficinas de los últimos Ediles a las más de cinco constructoras de vivienda chatarra de interés social y medio con presencia nacional y local, a convertido a los Alcaldes de Zapata en “promotores inmobiliarios” buscando y negociando terrenos agrícolas que después proponen a los empresarios de la construcción. Hay mucho dinero de por medio y una terrible podredumbre en ello.
Geo, Tecno Urbe, Homex y Ara, son solo algunas de las constructoras-destructoras-que han hecho de los municipios de Emiliano Zapata y Xochitepec entre otros, su centro de operaciones, los desarrollos inmobiliarios que han llevado a cabo en ellos van desde las viviendas deplorables que Ud. y yo conocemos de menos de 65 m2, hasta las de alto nivel que incluyen campo de golf, áreas verdes y albercas, como el que se encuentra desarrollando la empresa Ara en tierras cercanas a Tepetzingo y que tiene a los doce pueblos en pie de guerra por el bajo nivel del manantial “Chihuahuita” y la terrible contaminación a los mantos freáticos de la zona.
Las plantas de tratamiento de aguas negras de estos desarrollos una vez que el mismo es vendido en su totalidad, pasan a manos de supuestas asociaciones de vecinos que poco o nada saben de ello y acaban siendo focos de infección a cielo abierto, con la complicidad desde luego de las autoridades sanitarias de los municipios, sin tomar en cuenta la propensión agrícola de esa región que día a día se va apagando, logrando que sus pobladores busquen entonces el reto de irse “al otro lado” dadas las condiciones de miseria en que se ven.
El municipio de Emiliano Zapata vivió el cambio democrático al mismo tiempo que el de Cuernavaca, fue en la elección de 1997 cuando llega a conducirlo el Partido Acción Nacional después de décadas de que el PRI lo gobernó, ésta nueva administración panista conservó en casi todo lo que pudo la tradición agrícola y comercial del municipio, su crecimiento poblacional se mantuvo dentro de la lógica estatal y los desarrollos inmobiliarios fueron exiguos y con poco impacto en la estructura social y ecológica de los Zapatenses.
Acción nacional repite en la presidencia de Emiliano Zapata-dado el efecto Fox-fue a partir del año 2000 cuando se empieza a sentir la desmedida proclividad del Ayuntamiento a aprobar estos nuevos desarrollos inmobiliarios, el crecimiento en vivienda que se observó desde esa administración fue exponencial con respecto a los anteriores, se daban permisos a diestra y siniestra, el cabildo estaba debidamente “aceitado” y aprobaba casi todo. La comunidad se empezó a llenar de pequeñas casas habitación que más asemejaban a pajareras. El hermoso, multicolor y transparente paisaje campirano se tornaba rápidamente en el unicolor amarillo o blanco de éstas nuevas y fastidiosas construcciones.
Para el 2003 Acción Nacional volvía a repetir en el Ayuntamiento, un personaje de apellido Caballero-solo de nombre-bueno para los números, ya que fue tesorero de la pasada administración, se dedicó a “darle vuelo a la pluma”. No había desarrollo inmobiliario que cayera en sus manos que no autorizara, mucho se dijo que siguiendo la tradición, el “arancel” para la aprobación de cualquier desarrollo de vivienda era de solo mil pesos por cada una de las casas habitación que se quisiera construir, así que, si Ud. quería llevar a cabo una construcción de trescientas casas, bueno pues, eran trescientos mil pesos para el alcalde en funciones. Así el Sr. Caballero, dicen que se construyó algunos de los nuevos edificios que visten el centro del pueblo.
Y llega el PRI en el 2006. “Un gobierno como debe ser” versa el slogan del actual ayuntamiento. Cuestionado por su proclividad a los elevados gastos, el Edil también se ha dedicado a autorizar desarrollos y siguiendo la vieja regla del “arancel” hay quien dice que ahora son mil quinientos pesos por casa habitación, la inflación también ha pegado a los bolsillos de la corrupción. ¡Faltaba más!
Ahora Emiliano Zapata se encuentra envuelto en un escándalo electoral, resulta que el PAN y el PRI-que son la voz cantante-no están de acuerdo con los resultados electorales que hicieron ganar al “Rancherito” así le dicen al candidato del PRD que les ganó el pasado 5 de Julio. Argumentan o “arjumentan” que hubo más votos que votantes, es decir hubo “chanchullo”, cuando esos dos partidos tuvieron representación en cada una de las casillas de votación.
Lo curioso del caso es que es público y notorio que tanto el PAN como el PRI rebasaron por mucho sus topes de campaña y que se gastaron mucho más que lo que sus respectivos partidos les dieron como prerrogativa electoral. ¿De dónde salió el dinero para esas dos campañas?
Piensa mal y acertaras…las constructoras.
JABONAZO
¿Sabe Ud. quien es la Directora de Educación del Ayuntamiento de Cuernavaca? Pues la esposa del Secretario de Educación estatal, todo en familia. ¡Qué padre!
Éste crecimiento auspiciado y ofertado convenientemente desde las oficinas de los últimos Ediles a las más de cinco constructoras de vivienda chatarra de interés social y medio con presencia nacional y local, a convertido a los Alcaldes de Zapata en “promotores inmobiliarios” buscando y negociando terrenos agrícolas que después proponen a los empresarios de la construcción. Hay mucho dinero de por medio y una terrible podredumbre en ello.
Geo, Tecno Urbe, Homex y Ara, son solo algunas de las constructoras-destructoras-que han hecho de los municipios de Emiliano Zapata y Xochitepec entre otros, su centro de operaciones, los desarrollos inmobiliarios que han llevado a cabo en ellos van desde las viviendas deplorables que Ud. y yo conocemos de menos de 65 m2, hasta las de alto nivel que incluyen campo de golf, áreas verdes y albercas, como el que se encuentra desarrollando la empresa Ara en tierras cercanas a Tepetzingo y que tiene a los doce pueblos en pie de guerra por el bajo nivel del manantial “Chihuahuita” y la terrible contaminación a los mantos freáticos de la zona.
Las plantas de tratamiento de aguas negras de estos desarrollos una vez que el mismo es vendido en su totalidad, pasan a manos de supuestas asociaciones de vecinos que poco o nada saben de ello y acaban siendo focos de infección a cielo abierto, con la complicidad desde luego de las autoridades sanitarias de los municipios, sin tomar en cuenta la propensión agrícola de esa región que día a día se va apagando, logrando que sus pobladores busquen entonces el reto de irse “al otro lado” dadas las condiciones de miseria en que se ven.
El municipio de Emiliano Zapata vivió el cambio democrático al mismo tiempo que el de Cuernavaca, fue en la elección de 1997 cuando llega a conducirlo el Partido Acción Nacional después de décadas de que el PRI lo gobernó, ésta nueva administración panista conservó en casi todo lo que pudo la tradición agrícola y comercial del municipio, su crecimiento poblacional se mantuvo dentro de la lógica estatal y los desarrollos inmobiliarios fueron exiguos y con poco impacto en la estructura social y ecológica de los Zapatenses.
Acción nacional repite en la presidencia de Emiliano Zapata-dado el efecto Fox-fue a partir del año 2000 cuando se empieza a sentir la desmedida proclividad del Ayuntamiento a aprobar estos nuevos desarrollos inmobiliarios, el crecimiento en vivienda que se observó desde esa administración fue exponencial con respecto a los anteriores, se daban permisos a diestra y siniestra, el cabildo estaba debidamente “aceitado” y aprobaba casi todo. La comunidad se empezó a llenar de pequeñas casas habitación que más asemejaban a pajareras. El hermoso, multicolor y transparente paisaje campirano se tornaba rápidamente en el unicolor amarillo o blanco de éstas nuevas y fastidiosas construcciones.
Para el 2003 Acción Nacional volvía a repetir en el Ayuntamiento, un personaje de apellido Caballero-solo de nombre-bueno para los números, ya que fue tesorero de la pasada administración, se dedicó a “darle vuelo a la pluma”. No había desarrollo inmobiliario que cayera en sus manos que no autorizara, mucho se dijo que siguiendo la tradición, el “arancel” para la aprobación de cualquier desarrollo de vivienda era de solo mil pesos por cada una de las casas habitación que se quisiera construir, así que, si Ud. quería llevar a cabo una construcción de trescientas casas, bueno pues, eran trescientos mil pesos para el alcalde en funciones. Así el Sr. Caballero, dicen que se construyó algunos de los nuevos edificios que visten el centro del pueblo.
Y llega el PRI en el 2006. “Un gobierno como debe ser” versa el slogan del actual ayuntamiento. Cuestionado por su proclividad a los elevados gastos, el Edil también se ha dedicado a autorizar desarrollos y siguiendo la vieja regla del “arancel” hay quien dice que ahora son mil quinientos pesos por casa habitación, la inflación también ha pegado a los bolsillos de la corrupción. ¡Faltaba más!
Ahora Emiliano Zapata se encuentra envuelto en un escándalo electoral, resulta que el PAN y el PRI-que son la voz cantante-no están de acuerdo con los resultados electorales que hicieron ganar al “Rancherito” así le dicen al candidato del PRD que les ganó el pasado 5 de Julio. Argumentan o “arjumentan” que hubo más votos que votantes, es decir hubo “chanchullo”, cuando esos dos partidos tuvieron representación en cada una de las casillas de votación.
Lo curioso del caso es que es público y notorio que tanto el PAN como el PRI rebasaron por mucho sus topes de campaña y que se gastaron mucho más que lo que sus respectivos partidos les dieron como prerrogativa electoral. ¿De dónde salió el dinero para esas dos campañas?
Piensa mal y acertaras…las constructoras.
JABONAZO
¿Sabe Ud. quien es la Directora de Educación del Ayuntamiento de Cuernavaca? Pues la esposa del Secretario de Educación estatal, todo en familia. ¡Qué padre!
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