¿SEMBRADOR DE ODIOS O PATRIOTA A CABALIDAD?

¡No estaba muerto, andaba de parranda¡

Muchos creían que Andrés Manuel López Obrador ya estaba dentro del ataúd político y no le daban más de tres años para que solo fuera una parte de la historia de este país que no llegó a concretarse. Comentarios fueron y vinieron en contra del “Peje” sin cerciorarse que este personaje de muerto no tenía nada y que sus múltiples recorridos por México le estaban dando muchos seguidores.

Pecado capital es la soberbia y por eso el gobierno federal y uno que otro estatal tendrán que pagar las consecuencias de no reconocer al movimiento del “Sr. López” -como peyorativamente le nombran algunos de los “periodistas” de la radio- como algo real que forma parte del tejido social de nuestra nación.

Esa soberbia gubernamental ha logrado que muchos de los sentimientos de la gente que mas carencias tiene se unan en torno al pensamiento del tabasqueño y se logre el caldo de cultivo necesario para que una revolución de magnitudes indescriptibles este a la puerta de la entrada. Calderón le ha apostado (como en Morelos también) ha que todos tenemos un precio y así han salido “de compras” para adquirir conciencias dentro de los partidos políticos que están en contra del suyo, logrando adquirir el apoyo (aunque sea solo temporal) de diputados en la legislatura estatal a cambio de promesas de candidaturas en el 2009 o simplemente bajo la frivolidad de cantidades millonarias para quien quiera sumarse al esfuerzo blanquiazul.

Los adversarios políticos no se acaban con el hecho de comprar conciencias, no se acaban mandando a “esquiroles” mediáticos como Ferriz de Con (Grupo imagen de Marta Sahagún y Vásquez Raña) o al inefable Beteta (grupo formula de Azcarraga) a destruir la imagen de alguien por medio de diatribas e insultos, eso lo único que logra es exacerbar mas lo ánimos y confrontar a la derecha con la izquierda o peor aún a los pobres con los ricos.

Don Jesús Reyes Heroles entendió muy bien esto, a nadie conviene tener una izquierda beligerante que no forme parte de la sociedad en México, también entendió muy bien que el dialogo y el respeto era la forma y sigue siendo la única forma de conformar acuerdos y así con esa lógica el primero de Abril de 1977 en Iguala Guerrero anunciaba que se tenía que tomar la decisión de promover cambios sustantivos en el esquema electoral para abrir espacios y hacer frente a la inminente realidad política del país. El anuncio en esa ciudad no fue casual, era la capital de la entidad donde habían surgido el mayor número de movimientos campesinos y armados contrarios al gobierno federal, como Genaro Vázquez Rojas y el maestro Lucio Cabañas.

Al año siguiente se promovería una ley de amnistía en donde organizaciones clandestinas como la liga comunista 23 de Septiembre, el Partido de los Pobres o el Movimiento de Acción Revolucionaria, torturados y presos en el marco de la guerra sucia de los años setenta obtendrían su libertad; una constante exigencia de la izquierda que completaba este paquete de cambios para sentar las bases, a través del diseño de conductos democráticos, en concreto el fin de la clandestinidad política.

Don Jesús decía: “Prefiero tenerlos aquí en las cámaras, que en la sierra combatiendo”. Que lejano se ve eso a la óptica de los últimos acontecimientos en el país, empezando por el desafuero de AMLO, el último informe de Fox bajo circunstancias extremas, las elecciones cuestionadas del 2006, la resistencia postelectoral, la toma de posesión de un presidente en controversia, la reforma electoral, la ley del ISSSTE y ahora la iniciativa de reforma energética. La izquierda se está radicalizando por no encontrar los espacios adecuados y sería peligrosísimo que retornaran a la Sierra.

Me preocupa la toma de las tribunas del Senado y de la cámara de los diputados, pero mas me inquieta el tono amenazante y los insultos entre quienes deberían de tener la mayor mesura, por un lado Ricardo Monreal amenazando abiertamente al PAN con medidas de resistencia mayor y por el otro lado a Manlio Fabio Beltrones como vocero de estos últimos arremetiendo en contra de Monreal diciéndole farsante y a Creel por otro lado muerto de miedo sin saber que hacer.

Urgente es a la brevedad que se le “eche un balde agua fría” a este asunto tan grave de la confrontación, es de la mayor importancia que se sustituya a Juan Camilo Mouriño y a la brevedad se nombre a un secretario de gobernación a la altura de las circunstancias, que no este cuestionado y que además tenga el respeto de todas las fuerzas políticas del país como antaño fue Reyes Heroles el padre. ¿Que les parecería a Marco Adame? un día le pronostiqué que sería gobernador y acerté.

A inicios del siglo pasado a Francisco I. Madero lo tildaban de sembrador de odios y terminó siendo patriota a cabalidad. Quizás AMLO no sea ninguna de estas dos cosas, lo que si es real es que no está muerto políticamente y si goza de cabal salud.

JABONAZO

Muchos senadores del FAP tomaron la tribuna. ¿Y el de Morelos por el PRD? No lo vi por ningún lado. A lo mejor no asistió.